El Salvador nos sorprende con el pueblo de Tamanique, donde la costa y la montaña se conjugan, para complacer a quienes gustan del relax y a los amantes de la aventura y la diversión.
Es una villa muy antigua del departamento de La Libertad, que además, se empeña en mantener y transmitir sus tradiciones a las nuevas generaciones, para luego mostrarlas al mundo conservando su identidad.
TAMANIQUE - Pueblos bonitos de El Salvador. Foto por ElSalvadorViajar.
Vamos a conocer a este cautivante pueblo artesanal que nos invita a disfrutar de la naturaleza a lo largo y ancho de su geografía.
Datos de Tamanique
| País: | El Salvador |
|---|---|
| Departamento: | La Libertad |
| Categoría: | Pueblos |
| Elevación: | 635 m |
| Superficie: | 101 km² |
| Población: | 15,119 |
| Pueblo indígena: | Pipil y Maya |
Ubicación de Tamanique
Historia y Características de Tamanique
La fecha de nacimiento de este destino centroamericano, nos lleva hasta los tiempos prehispánicos, cuando sus primeros pobladores eran pipiles y mayas.
Su actual nombre en lengua nahuat tiene dos significados: por un lado se dice que apunta a “con su alberca de tierra”, y otros comentan que es “cerro capturado”.
Ya para el Siglo XVIII, sus habitantes se dedicaban a la cría de aves de corral, y al cultivo del bálsamo, cacao y maíz.
Las actividades económicas ahora giran en torno a la producción de café y a la explotación del bálsamo; también resalta la cría de gallinas y pavos, así como de ganado vacuno y porcino. Sin olvidar a los tejedores de cestas, ebanistas y especialistas en el tejido de hamacas, quienes hacen de Tamanique, un territorio de artesanos con su pintoresca labor.
Asimismo, en pleno corazón de sus montañas, existen generosos bosques alimentados por las aguas de ríos, arroyos, y refrescantes cataratas y cascadas, que invitan a practicar el senderismo.
De la misma manera, sus hermosas y oceánicas playas, atraen sin duda alguna a locales y extranjeros, lo que ha aumentando considerablemente el turismo en este Pueblo Vivo de El Salvador.
Qué ver y visitar en Tamanique
Este encantador poblado, a casi 35 kilómetros de la capital, San Salvador, mantiene su carácter colonial en las casas de una planta, con techos de tejas y los característicos portales para protegernos del sol o las lluvias, dándole un aspecto placentero a la vista.
Nos encontramos en la Calle Principal, cuando vemos la Iglesia de Nuestra Señora de la Paz, una pequeña pero coqueta edificación, que resguarda en su interior la imagen de la Virgen, Patrona del pueblo.
A un costado de este templo está el Parque Central, lugar de esparcimiento donde los ciudadanos acuden a descansar y a conversar con sus vecinos, mientras los chicos juegan a sus anchas.
Fiestas Patronales y Gastronomía de Tamanique
La devoción por las festividades religiosas o asociadas a eventos de este tipo, son las más importantes en la localidad de Tamanique. Por ello, una actividad que se cumple de manera rigurosa, es visitar a los difuntos el día de los muertos, en el mes de noviembre.
Durante la Semana Santa se llevan a cabo las habituales Procesiones, destacando el entierro del Santo Sepulcro, y a principios del mes de mayo, se colocan las típicas cruces decoradas con papeles de colores.
Las fiestas Patronales se celebran durante la segunda quincena de noviembre.
Es común conseguir locales donde se venden las tradicionales pupusas, rellenas de variados productos. Al mismo tiempo, se vende mucho pescado por la cercanía con el mar, incluyendo carnes, frutas y verduras. La sopa de frijoles o los tamales de queso son muy solicitados.
En las tardes se suele acompañar una taza de café con pan dulce, como merienda.
Lugares cercanos que visitar
El poblado de Tamanique se encuentra a más o menos 20 minutos de las playas más destacadas de la localidad.
Una de las mas concurridas es la Playa El Tunco, con su característica escultura natural, La Piedra, que se levanta muy cerca de la orilla en forma de un cerdo o tunco acostado, dándole el nombre al lugar.
En ella, los surfistas se entregan a las fuertes olas entre los meses de abril y agosto, período perfecto para practicar este deporte.
A su lado, Playa El Sunzal, que igualmente te invita a montar sobre las crestas de las olas, ofreciendo una zona mas tranquila y oleaje mas moderado en parte de su litoral, ideal para el buceo o el snorkel y en tal caso, disfrutar de la rica brisa marina en la orilla de su costa.
Por las noches, el ambiente alegre nos lleva a los diferentes bares a tomar una cervecita bien fría y a degustar pescados o mariscos frescos.
El Palmarcito es otra de las playas que ha ido ganando popularidad entre los visitantes, con su fina arena volcánica, ideal para caminar bajo el sol sintiendo la brisa en la cara. Sus distintos restaurantes ofrecen manjares variados, ideales para todos los gustos.
Por último, pero no menos importante, las zonas boscosas de esta villa, nos reservan una sorpresa atractiva e interesante, las cascadas de Tamanique, muy cerca del pueblo, un poco mas de 30 minutos.
Tras una caminata, el esfuerzo se recompensa al toparse las fatásticas y frescas caídas de agua, perfectas para nadar y saltar. Resulta en un gran lugar, increíble y mágico.
Sin duda, Tamanique es ese rincón salvadoreño para quienes desean desconectarse del bullicio citadino, donde la calma y el contacto con la naturaleza son una realidad. Visitarlo será una experiencia inolvidable, todo un privilegio.
